Sinceramente he de decir, que la crisis propiamente dicha, no me está afectando mucho, derivado, evidentemente, de los cambios estructurales que ha sufrido la oficina en la que trabajo y de la que, sin lugar a dudas, he salido muy favorecido.
También tengo que decirlo, hasta hace un par de meses mi cabeza se quebraba menos y tenía más tiempo, para entre otras cosas, dedicarlo a crear entradas en el blog (lo habréis notado)
A nadie le engañaria diciendo que estamos inmersos en un ciclo de incertidumbre, provocado por el caos financiero que vive el país o mejor dicho todas las naciones más o menos desarrolladas, nadie se puede sentir indiferente a la situación económica por la que atraviesa las grandes economías mundiales. Solo hay que acercarse al escaparate de los diarios economicaos de los ultimos días: El Ibex cedía un 9,14% ayer viernes y un 21% desde el lunes. Las Bolsas de todo el mundo sufren la peor semana de su historia, Wall Street y su Dow Jones protagonizaron su peor semana de la historia al caer un 18,15%. En los últimos meses, los expedientes de regurlación de empleo inundan portadas; Seat lo presentaba para despedir a 1.346 trabajadores, Spanair presentaba otro que afecta a 954 Empleos a Tiempo Completo, Bridgestone Hispania presentaba uno de carácter temporal que afecta a 2.804 trabajadores y de la misma forma Nissan, ha sido la ultima en unirse.
Pero siempre de todas estas guisas, hay algunos sujetos que no parece importarle mucho, caso del Promotor Fernando Martín, quien como publica hoy el diario Público, cobró 139 millones antes de suspender pagos en MARTINSA-FADESA, uno de los principales grupos inmobiliarios de España y protagonista del mayor concurso de acreedores de la historia de España, o de como los mandamases de Fortis organizaban un festín, tras recibir ayuda pública, en el restaurante Luis XV de Mónaco, el más lujoso del principado de Mónaco (3 estrellas de la Guía Michelín)
Y es que ya se sabe, que cuando se dispara con polvora ajena...
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