miércoles, julio 30, 2008

Asi se hace un Fanegas

Estos días que estamos pasando en la playa, tantas horas al sol, del orden de 5-6 tostando el culo, dan lugar a numerosas e inconfesables visiones de la orilla.
Hoy voy a dedicarme así improvisando, porque sin desde el ordenata de uno no es lo mismo, a confesar alguna de esas vivencias.
No creo mucho en los programillas estos de la Cuatro, que te arreglan la vida, tus cuentas, la vida en familia, pero al ver el panorama que contemplo en la orilla, sin duda tengo que decir que somos lo que comemos!
Tras rato leyendo un librete, un chapuzón que otro y vuelta y vuelta al sol, descubro que soy un bicho raro. 3 de cada 4 espécimenes, mientras yo me estoy metiendo un melocotón, ellos se han zampado dos bolsas de fritos, gusanitos o el copón en bolsa, pura química grefusiana. Todo ello para abrir boca, cuando llega la hora de zampar, bocatas para que os quiero! Los hay de todos los colores; de rojo choricete, salchichón, amarillo de queso e incluso colorados de la lata de mejillones que se meten. Ya hasta la hora de irse, se deleitaran con variados helados y es que la puñetera nevera no tiene fin
Autentico Apuraorzas o como diría Joaquín Reyes, un caótico Fanegas!
Que nadie se equivoque, que somos lo que comemos y que si ellos son felices, brindemos con la panceta en alto!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajaja me encanta este articulillo, lo malo es ke eso del bocata y lanevera me suena, porke el otro dia nosotros nos fuimos asi con la nevera,,,, pero te juro ke no habia ni fritos ni bolsas varidas, unos bocatas discretos de jamon y keso , y unas cervecillas sin alcohol y un poco de sandia jajajaja para refrescar, este sabado repetimos os apuntais, besos de juan

lalo barra dijo...

La verdad es que tienes mucha razón. Las orillas del mar son como un gran escaparate, levantas la cabeza, mira por encima de la barriga intentando otear la orilla del agua salada o su infinito horizonte y...¿que te encuentras?...una mujer gorda con gafas de sol, pareo estampados y con flecos mirando constantemente entre la espuma, buscando....a saber que... y detras, bueno pues su acompañante, equipado como ella pero en plan masculino que lleva de la mano a uno de sus nietos...y que parece estar pensando...."si me la cambiasen (la mujer) aunque pusiera 39 0 40€ encima....por aquella tía de allí.... sería el tio mas feliz de la playa....
Y ambos, hombre y mujer...y nieto incluido, pensando en la paella que tienen apalabrada para las 2:30 en el chiringuito... claro esto depues de varias raciones de fritos...en fin, Fernando, lo de todos los veranos....

Anónimo dijo...

... y es que, es la orillita de la playa la auténtica pasarela en la que nos importa cómo estamos para desfilar. The Beach Fashion Week nunca mejor dicho.
Los excesos se pagan ,si no , ya llegará el otoño para engrosar las listas de gimnasios, deseosos de clientela veraniega. Cuqui