Alternativas a los gravámenes fiscales

El Gobierno se ha marcado el objetivo de incrementar hasta 1,5 puntos del PIB la presión fiscal el próximo año, es decir, ingresar hasta 15.000 millones de euros adicionales, un volumen sólo alcanzable con una importante subida fiscal de los impuestos especiales.

Sin embargo, dicho aumento en hidrocarburos, tabaco, alcohol o electricidad, probablemente sea insuficiente, teniendo que, además de eliminar la deducción de 400 euros, incrementar el tipo en el IVA.

Sea quizás el momento de plantearse gravar aquellas actividades que gozan de una tributación nula; como puede ser la prostitución y el consumo de drogas blandas (hachís y marihuana, por ejemplo).
En la prostitución, sólo con un tipo impositivo del 7% en IVA, la tributación en los distintos impuestos directos junto con la integración de cotizaciones en la Seguridad Social se podría recaudar por encima de 8.000 millones de euros, mientras que, tomando como base el número de consumidores habituales de estas drogas entre la población comprendida entre los 15 a los 65 años, implicarían un consumo anual aproximado por encima de las 4.380 toneladas de hachís anuales, (4 millones de consumidores a 3 gramos diarios) con un precio aproximado en el mercado negro de unos 13.000 millones de euros, pudiendo recaudar unos 7.000 millones en impuestos sin mucha dificultad.

Claro está no se pondrá en marcha próximamente pero quizás sea el momento de marcar estas líneas en que vislumbrar nuestro horizonte económico.